Un sollozo que parte el alma se escurre por los rincones, suspiran las paredes, lloran las ventanas, gimen las puertas, es el lamento de un hombre triste en una casa triste...desde que te fuiste.
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Precioso y triste. La foto acompaña.
ResponderEliminarBesos, Marisa.
Precioso amiga la foto y el texto quedan totolmente aunados..cuantas cosas se pueden decir con las palabras adecuadas,sin necesidad de añadiduras, eres una verdadera artista en es género, txapeldun, felicitaciones, un abrazo de Begoña
ResponderEliminarHermoso pero triste, que feo momento pude sentir ese dolor y soledad. Buen fin de semana.Te mando un beso grande.
ResponderEliminarGracias queridos amigos, saber que a tan talentosos escritores les parece bonito lo que escribo, me hace sentir llena de felicidad :) Un abrazo a los tres!
ResponderEliminar¡qué soledad! tristisimo, en cuatro palabras has definido la soledad, un saludo
ResponderEliminarEs curioso como los lugares se impregnan con los sentimientos de quienes los habitan o deshabitan, en este caso. Me gustó mucho como lo reflejas. Saludillos
ResponderEliminarBienvenida Marian, cuando se ha sentido es tan fácil describir la soledad... gracias por escribirme :)
ResponderEliminarSi, querida Puck, así es, gracias por tus palabras :)
ResponderEliminarPrecioso, tristísimo, muy bien escrito. Tu eres una gran escritora, y no precisamente porque yo lo diga.
ResponderEliminarUn abrazo
Ay Anita gracias por tus palabras, quisiera saber aceptar los cumplidos con soltura..pero no lo puedo evitar y lo diré...YUPIIIII :)
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