Miles de vivencias y ningún recuerdo preciso, sólo una vaga sensación de pánico. Abro los ojos y la misma oscuridad me envuelve, un leve resplandor rojizo, voces ahogadas, opresión...opresión...
Quiero gritar y de hecho grito, pero de mi boca no sale ningún sonido. El recinto se hace más reducido por momentos, casi no puedo ni moverme, comienzo a sufrir de claustrofobia...AUXILIO!! AUXILIOO!
Una urgencia imperiosa por salir me domina, el mundo todo se comprime contra mi y cuando ya estaba a punto de desfallecer, cesa la presión, siento un frío que me cala hasta los huesos y más que verla, siento una potente luz sobre mí. Al abrir los ojos varias personas me miran con curiosidad y detenimiento, entonces unas palabras resuenan en mis oídos y pude escuchar claramente: "Felicidades !!! ha sido un varón!!"
y suavemente me sumerjo en esta nueva vida.
Muy bueno Artistalight.
ResponderEliminarSi me permites un consejo: Pon otra foto. La que has elegido destripa el final antes de tiempo.
Un beso.
Querido Señor Torcuato, gracias...
ResponderEliminarahora mismo cambio la fotito :) un abrazo.
¡Hola! Con gusto te comento, que bien! Esta muy atrapante y me mantiene a la expectativa, me gusta el tema. Te enviaré una observación a tu correo personal. Un abrazo.
ResponderEliminarQuerido y apreciado Señor Héctor, debo decirle que pude comprender la esencia del Microrrelato al leer su entrevista, supe entonces cómo debía relatarlos :) y traté de hacerlo, una vez más gracias por su gentileza. :)
ResponderEliminarQué bueno, te veo centrado entre el nacimiento y la muerte... ¿qué será lo próximo?
ResponderEliminarUn abrazo
Todo parto tiene algo Buñueliano.
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